¿En qué consiste el interiorismo comercial?

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El interiorismo comercial es aquella disciplina, normas, funciones y acciones encargada de la decoración del espacio, permitiendo diseñar y ofrecer un concepto de decoración interior único a un punto de venta facilitando las ventas y una visión positiva de negocio.

Por esta razón, el interiorismo es esencial en todo proyecto de mobiliario comercial y retail o comercio minorista (supermercados, farmacias, librerías, tiendas fase fashion, etc.); siendo utilizado como herramienta esencial de comunicación de marca.

Elementos importantes del interiorismo comercial

El interiorismo comercial trabaja a partir de una sensación creativa y comercial, atendiendo a todo factor implicado con la estrategia de marca y venta.

Los proyectos de decoración no deben de ser un lucimiento personal del profesional encargado de realizar el proyecto en cuestión, han de ser espacios escrupulosamente diseñados con sus características específicas para cada circunstancia y resolviendo las pautas que marcan las diferentes normativas de aplicación para cada una de las actividades.

Los equipos de interiorismo comercial trabajan en un primer momento con el cliente con el objetivo de estudiar su cometido, visión y valores. Posteriormente pondrán en práctica toda la información obtenida desarrollando todo el hilo argumental.

El trabajo de una empresa de diseño de interiores o de un interiorista corporativo está orientado a combinar colores, iluminación, diferentes estéticas, posicionamiento de los productos haciendo mucho más fácil el acceso al consumo.

La experiencia del cliente dentro del interiorismo comercial

Está más que demostrado que la estética es una fuerte y fundamental arma para el triunfo de todo negocio. Se trata de un factor clave sobretodo en este mundo tan competitivo.

Ser únicos mostrando un diseño diferente es la clave del éxito, de ahí la importancia que tiene el interiorismo comercial.

Convertir el espacio en un lugar agradable, en el que no solo sea visitado para comprar determinados productos sino que la vez genere ciertas sensaciones y experiencias positivas es clave.

El interiorismo comercial no solo toma en consideración al cliente sino también a aquella persona que pasa una gran parte de su tiempo atendiendo al cliente, el encargado de mantener el lugar en perfectas condiciones; es decir al trabajador. Hay de tenerse en cuenta que la calidad, confort de un espacio influye mucho en la creatividad profesional.

Cada vez toma más importancia la imagen que los clientes tengan del espacio comercial, es esencial que se encuentren a gusto, cómodos.

El espacio debe de diferenciarse fácilmente de la competencia, por ello es importante:

  • Analizar en profundidad el mensaje. El interiorismo comercial debe de ser coherente con el mensaje de la marca y lograr transmitirlo por medio del entorno físico del local. No se puede olvidar que el diseño y proyecto del local una vez terminado, ha de ser adecuado a la actividad que realiza y siempre un espacio eficiente, por lo que primeramente se ha de pensar en la distribución, función y finalizar con su acabados y estética.
  • Lanzar una imagen única y original. Dependiendo de la impresión que la marca provoque va a ser determinante para un incremento en las ventas.
  • Plantear y diseñar una buena distribución espacial. Es importante evitar todo tipo de elementos que obstaculicen la entrada al cliente o impidan poder acercarse y detenerse en aquellos puntos destacados. El modo de hacerlo es distribuyendo de manera correcta todo el mobiliario, estantes, calculando bien los pasillos, zonas de circulación entre otros.
  • Iluminación apropiada. Conseguir espacios acogedores es fundamental, y esto se consigue gracias a una iluminación adecuada. Es importante diferenciar aquellas zonas destinadas al descanso de aquellas que son utilizadas para el tránsito de clientes.
  • Introducir elementos únicos o característicos al diseño. El cliente busca un objeto, característica o elemento diferenciador que le haga consumir en ese local y no en otro.

El diseño de interior de una empresa tiene que estar regulado en función de los fines comerciales, objetivos y coherencia con la identidad de la marca.

Es importante un proceso de comunicación acertado, en el que se comunique lo que es y a que se dedica el negocio. Todo mensaje corporativo debe de estar soportado por la coherencia.

Cualquiera de las tiendas de lujo es un buen ejemplo de interiorismo comercial puesto que cumple con todas las premisas: recorrido visual, referencias a la marca, conceptos diferenciadores, experiencia de cliente, innovación, etc.

Todo elemento diferenciador es la tónica dominante y cada material está pensado para actuar en un escenario común de referencias al discurso de marca.

Una marca comercial es difícil que destaque si no se diferencia de su competencia; por ello la importancia del interiorismo comercial el cuál ayuda a un negocio a transmitir de manera correcta su esencia ante el cliente y a ser capaz de competir con los más grandes. Solicite presupuesto a nuestros expertos en interiorismo en Zaragoza, sin compromiso alguno.

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